Un género de videojuegos en el que el personaje del jugador atraviesa los subterráneos tipo laberinto (su papel puede ser jugado, por ejemplo, en mazmorras o sistemas de cuevas), lucha con enemigos encontrados, recoge mejores equipos y avanza a nuevos niveles de experiencia. Por lo general, la acción se presenta desde una perspectiva en primera persona (FPP), aunque la vista isométrica también es popular.
Al igual que en los juegos de rol, en los títulos de rastreadores de mazmorras podemos liderar la batalla tanto de un solo héroe como de todo el equipo de temerarios. Además de los oponentes (incluidos los jefes poderosos), varias trampas en forma de picos saltando de las paredes o incluso trampillas pueden representar un peligro. En muchos casos, la diversión se diversifica mediante acertijos lógicos o ambientales, tomados de los juegos de aventuras.
Curiosamente, los protagonistas a menudo no tienen la oportunidad de abandonar las mazmorras; por otro lado, sin embargo, en muchos juegos de este tipo hay una ciudad que actúa como punto de partida. Es allí donde los héroes se abastecen de artículos útiles y venden artículos innecesarios de equipos recolectados en el curso de aventuras anteriores.
Debido al grado relativamente pequeño de diversidad de ubicaciones preparadas para las necesidades de los rastreadores de mazmorras, sus creadores a menudo se inclinan hacia soluciones características para roguelike: el desarrollo de un sistema de generación subterránea aleatoria permite reducir costos y al mismo tiempo mantener un alto valor de la llamada rejugabilidad.
Los rastreadores de mazmorras florecieron en los años ochenta y noventa del siglo XX, luego los triunfos de las ventas se celebraron en ciclos como Wizardry, The Bard’s Tale, Might & Magic y Gauntlet. Los rastreadores de mazmorras y los juegos de rol se desarrollaron en paralelo, y con los años las diferencias entre ellos se desdibujaron. Además, actualmente los elementos de este género se pueden encontrar tanto en juegos de rol (ejemplos pueden ser secciones de laberintos de niveles múltiples en la serie Persona), como en producciones de hack’n’slash (como fue el caso en la primera entrega de la serie Torchlight, por ejemplo). En última instancia, los rastreadores de mazmorras clásicos lograron encontrar su propio nicho, como lo demuestra la popular serie Legend of Grimrock y la exitosa recaudación de fondos para The Bard’s Tale IV.